Dejamos a nuestra perrita una semana en agosto de 2022. Cuando la recogimos, estaba enferma, con mucha tos y muy muy sucia.
De allí la llevamos al veterinario y había cogido bronquitis de perrera. Estuvo casi un mes con antibiótico y muy malita.
Lo peor de todo es que le dijimos a la dueña que porque respiraba así y ella nos dijo que era porque estaba contenta.
Horrible, para no volver más y no recomendarla a nadie. He tardado mucho en escribir esta opinión.